Muchas personas creen que tener seguro es suficiente después de un accidente. Pero, ¿realmente necesitas un abogado si ya cuentas con una póliza? La respuesta corta es: sí, en muchos casos sí vale la pena.
El seguro no siempre está de tu lado
Las aseguradoras, incluso la tuya, son empresas que buscan minimizar costos. Esto significa que podrían ofrecerte una compensación más baja de lo que realmente mereces. Un abogado de lesiones personales va a ayudarte a negociar en tunombre y asegurarse de que recibas una compensación justa por tus gastos médicos, daños emocionales y pérdida de ingresos.
Protección contra tácticas injustas
Muchas veces, las aseguradoras utilizan tácticas como:
- Pedirte que firmes documentos sin explicarte bien.
- Hacer que aceptes un acuerdo rápido y bajo.
- Poner en duda la gravedad de tus lesiones.
Un abogado con experiencia sabe cómo manejar estas situaciones y proteger tus derechos.
Evaluación real del valor de tu caso
Un abogado puede ayudarte a calcular el valor real de tu caso, incluyendo daños que tal vez no habías considerado: tratamiento a largo plazo, impacto psicológico o futuras pérdidas económicas.
No tienes que pagar por adelantado
La mayoría de los abogados de lesiones personales trabajan bajo la modalidad de “honorarios condicionales”, lo que significa que solo cobran si ganan tu caso. No hay riesgos económicos para ti.
Tener seguro es útil, pero no siempre suficiente. Un abogado puede marcar la diferencia entre recibir lo justo o quedarte con menos de lo que mereces.
¿Tuviste un accidente? Consulta GRATIS con nuestro equipo legal. Estamos aquí para ayudarte.